Seguro que te has planteado esta pregunta más de una vez tal y como están las cosas: ¿Qué te conviene?.
Gastar el dinero en un capricho o ahorrar para tu tranquilidad .
Hace mucho tiempo que conozco a José, es un amigo de toda la vida y siempre le ha gustado vivir bien.
Me refiero a vivir bien a que nunca se ha privado de nada que pudiera pagar con su sueldo.
No me malinterpretes. Ni él ni su mujer, Alicia, son unos cabeza loca.
Siempre han gastado el dinero que tenían sin meterse en historias raras y aunque quizá tiraban de vez en cuando de tarjeta de crédito para irse a esquiar a Formigal, nunca ha sido nada que no pudieran controlar.
Cobraban, pagaban. Punto.
Sin dejar un duro para el ahorro. Carpe Diem.
Hasta ahora…
José Luis ha pasado a engrosar las listas del paro. Una historia como las miles que oímos cada día en la tele.
Una gran empresa de alimentación, cuyos ingresos han bajado, que aprovecha la reforma laboral para reducir sus costes laborales e incrementa su productividad.
Es decir que echa a la gente a la puta calle para ganar más (no porque necesite el dinero para asegurar su supervivencia). Y perdona el taco, pero es que esa es la realidad, por mucho que queramos los economistas adornarlo con jerga empresarial.
José Luis lleva desde que acabo la carrera trabajando. Esto son más de diez años, por lo que tiene sus dos años de paro.
Pero claro, con el paro viene a cobrar aproximadamente la mitad de lo que cobraba antes y las perspectivas de encontrar trabajo en el corto plazo no son muy buenas, y por supuesto nulas si quiere cobrar lo mismo que ha cobrado hasta ahora.
Es lo que se llama devaluación interna y significa que como no puedo bajar el valor de mi moneda porque estoy en el Euro, entonces bajo los salarios, la gente cobra menos, los precios tienen que bajar porque no hay demanda, y se incrementan las exportaciones porque el precio es más bajo.
Con su sueldo y el sueldo de Alicia pueden hacer frente a la hipoteca, a los gastos habituales de los niños, a los gastos domésticos y todavía a darse algún capricho, por lo que aunque les ha afectado, digamos que apretándose en el apartado “gastos innecesarios” de su presupuesto, pueden ir tirando.
Hablo muchas veces con José Luis.
La situación no está para tirar cohetes pero va tirando a la búsqueda de un empleo que le permita volver al ritmo anterior a su despido, y a medida que va pasando el tiempo, aún cuando consigue de vez en cuando un trabajo puntual, José Luis ve cada día el tema un poco más chungo.
¿Cómo podrían Alicia y José Luis estar en una situación mejor?
La crisis deja dos mensajes muy claros. Sin embargo aún siendo tan claros, hay mucha gente que todavía no se da aludida.
Estos dos mensajes son:
- Tu trabajo no es seguro. Un día puedes estar trabajando y al día siguiente puedes estar en la calle. No te fíes.
- Tu casa no es segura. Los precios de las casas no siempre suben, también bajan, y cuando bajan, junto con ellos baja tu patrimonio.
Estos dos mensajes han de llegar a tu cabeza y debes concienciarte. Lo que está pasando ahí fuera te puede pasar a ti.
De hecho estadísticamente es probable que te pase.
Luego ¿por qué actúas como si no fuera contigo?
Hay cosas que tú no puedes controlar,.. esto está claro:
- No puedes controlar que te den la patada.
- No puedes controlar el mercado inmobiliario.
- No puedes controlar el precio de las cosas.
- No puedes controlar la evolución del euribor.
Pero hay muchas otras que si puedes tener bajo control:
- Puedes controlar tus gastos en ocio.
- Puedes controlar tus gastos en productos domésticos.
- Puedes controlar tus gastos en “soplapolleces”
- Puedes controlar la parte de tus ingresos que decides utilizar para pagarte a ti mismo y no gastártelos.
El ahorro es la única forma en la que realmente te estás pagando a ti mismo y estás pensando en tu futuro.
Es la única forma que tienes de anticiparte a un futuro más chungo en el que se de alguna de las circunstancias que no quieres sufrir.
Es tu escudo de protección.
¿Dónde vas sin escudo de protección con la que está cayendo ahí fuera?
¿ Sigues pensando que la mejor opción es gastar el dinero en un capricho ?
No te confundas, no te estoy diciendo que vivas como un ermitaño, ni que te conviertas en un Mr o Mrs Scrooge.
Para nada.
Somos humanos, necesitamos distracciones, motivaciones, diversión. Si no la vida es una mierda, con perdón.
Pero tampoco puedes seguir viviendo como si no hubiera un mañana, fundiéndote todo lo que cobras,..
No es racional, no encaja con el momento que vivimos, y sobre todo es totalmente incompatible con que te quedes en la calle en un futuro cercano.
Reacciona!!
Ahorra entre un 10% y un 20% de lo que ganes. Ya, ahora mismo.
Escúchame bien, no te estoy diciendo que lo intentes hacer, te estoy diciendo que lo hagas (y si no sabes cómo te recomiendo este post y este otro donde te explico algún que otro truco)
¿Y cómo puedes elegir entre gastar el dinero en un capricho o ahorrar para tu tranquilidad ?
Date el capricho cuando quieras, siempre que hayas apartado de tus ingresos lo destinado al ahorro.
Si te fijas tu ahorro en un 15%, has ahorrado ese 15%, has hecho frente a tus gastos, te queda dinero y quieres aprovechar para pegarte una cena de escándalo en el restaurante más caro de Madrid, pues ole tus narices. Te lo has ganado y es tu dinero. Adelante, fúndetelo y que aproveche.
Y hablando de José Luis y Alicia, ¿qué crees que deberían hacer José Luis y Alicia ahora que su situación ha cambiado para estar más tranquilos?.
Déjame tu propuesta en comentarios, seguro que hay muchos José Luis y muchas Alicias que están en una situación similar y pueden estar interesadas en lo que aquí comentemos.
Si te ha gustado la entrada, ayúdame: dale al botón!! y comparte en tus redes sociales y SUSCRÍBETE para recibir un Curso ON Line totalmente gratuito con el que harás crecer tu cuenta corriente.
photo credit: lucas.leite via photopin cc
photo credit: Σταύρος via photopin cc
Muy buen artículo me ha dado animos. A tus amigos no se me ocurre que decirles más que les deseo suerte.
Saludos.
Gracias por tu comentario DrChunga, y efectivamente, suerte para mis amigos. Lo que si te puedo decir es que su situación ha mejorado recientemente. Y esta vez sí me están haciendo caso y han comenzado a ahorrar. No hay nada como un golpetazo contra la pared para enderezar el rumbo.
Un saludo!!
El típico planteamiento del ahorro, nada nuevo.
Ahora, hay que quitarse de la cabeza la idea del «trabajo de por vida». Hay que aprender a ser dinámicos, a seguir evolucionando laboralmente para que ni si quiera te pille por sorpresa un despido. es más, debería ser al revés. Deberías ser capaz de abandonar la empresa e irte a otra antes de que te despidan, por que eso trae dos beneficios:
1) Te hace crecer profesionalmente y personalmente. No te llevas el chasco de confiar en una empresa como si fuera tu padre cuando no lo es ni por asomo.
2) te hace crecer salarialmente. El único que se sube el sueldo eres tú. ¿Tienes problemas para ahorrar? No recortes tu gasto si te puedes centrar en incrementar tus ingresos. Tener ahorros siempre ayuda, pero hay que evitar ponerse límites a uno mismo, por qué el dinero se devalúa y la vida cada vez es más cara mientras tú te has centrado en ponerte un límite que no crece, y cada vez estarás más ahogado.
Tiene que cambiar la forma de pensar laboralmente en este país, y no sólo tienen que cambiar las empresas. Hay que saber decir que no a ofertas abusivas y mentalizarse de una vez de que eres tú el que le está haciendo un favor a la empresa y no al revés. Y esperar a buscar trabajo sólo cuando no lo tienes es lo peor que puedes hacer. ¿Tienes trabajo? Bien! Busca otro mejor! Y mientras sigues teniendo ingresos
Gracias por tu comentario Vetripy. Comparto una parte de lo que dices, pero no todo. Bajo mi punto de vista ni tú le haces un favor a la empresa ni ella a ti. Debe ser un acuerdo ventajoso para ambas partes. Y por mi parte, y hablo de forma completamente personal, nunca he buscado trabajo mientras estaba trabajando. Si estoy enfocado y comprometido con algo lo estoy 100%. Pero cada uno es un mundo, por supuesto y respeto todas las posturas.
Un cordial saludo
Ahora recuerdo el caso del carnicero del barrio que cada vez que me veía me decía que el país estaba en la ruina y que el gobierno se iba a incautar del dinero de todos los ahorradores, y que me lo gastara porque si lo dejaba ahí en la cartilla lo perdía, o que si me moría antes de tiempo se lo iba a quedar el banco o la hacienda pública. Este individuo le jodía que tuviera unos ahorrillos, pensaba que no me correspondía tenerlos, fruto de muchos años de no gastar en lujos ni en cosas innecesarias, y comprando siempre las ofertas para no derrochar el dinero, siempre con el mismo coche, y sin pegarme comilonas en restaurantes caros ni en viajes al extranjero.
Una persona no envidiosa te dice todo lo contrario, que ahorres porque el día de mañana cuando tu madre falte nadie te va a dar ni cinco, y te vas a ver solo con lo poco que tengas ahorrado, porque nadie te va a pagar el recibo de la luz, ni te va a ayudar si te hace falta… Este carnicero se compró un todo terreno Mercedes Benz de 300 CV, y se gastó 90.000 euros de golpe, y se compró una vivienda con cierto lujo porque había ganado mucho cortando carne y sirviendo a grandes restaurantes que le dejaban mucho dinero, y claro apenas tiene un duro ahorrado.
Hay una cosa peor que el envidioso, que es el envidioso que está mejor que tú, por tener mejor sueldo y mayor patrimonio, y aún así te envidia, porque considera que no te mereces tener nada y el que se lo merece es él todo, porque piensa que vale más que tú o considera que ha trabajado más y mejor, y tú no has luchado tanto como él en la vida.
Todo depende de lo que cobres mensualmente, si tienes una buena pensión, para qué vas ahorrar, te gastas casi todo con un pequeño remanente para si surge algún imprevisto y ya está. Si ingresas una miseria, tu bienestar futuro depende en gran parte de tus ahorros, porque necesitarás ese dinero para completar las muchas carencias que seguramente vayas a tener por tus bajos ingresos.
ARTURO KORTÁZAR AZPILIKUETA MARTIKORENA ©