Imagina que te quieres comprar un coche y te ofrecen financiarlo en el concesionario. Y te dan unas determinadas condiciones de plazo, tipo de interés para comprar tu coche. Sin embargo, en tu entidad financiera de toda la vida has visto que están anunciando préstamos y aseguran que están muy bien.
¿Cómo sabrás cuál es el que más te conviene?
Justo a esto te voy a ayudar con este artículo titulado Simulador para saber cuánto voy a pagar por mi préstamo. Cuando acabes de leer sabrás perfectamente por qué puerta tienes que entrar a pedir tu préstamo para el coche.
Yo odio los préstamos.
Vaya por delante. Un préstamo es una clase de deuda. Y para mí la deuda son las cadenas del siglo XXI.
Un préstamo tiene mucha más importancia de lo que parece. A simple vista estás pidiendo dinero a alguien y se lo vas a devolver en un determinado período de tiempo pagando adicionalmente unos intereses. Tan sencillo como esto. ¿Verdad?
¿O no?
Vamos a analizarlo un poco más en detalle desmenuzando literalmente lo que significa:
Estás pidiendo dinero a alguien.
Ese alguien puede ser un familiar o un profesional de esto. En cualquiera de los dos casos estás estableciendo el principio de una relación a largo plazo con alguien. Ese alguien puede evolucionar con el paso del tiempo. Tú puedes evolucionar con el tiempo y convertirte en otro tipo de persona. No es que desconfíe de ti. Es que las circunstancias cambian y las personas con ellas.
¿Estás seguro de que vas a querer seguir manteniendo esa relación a lo largo del tiempo hasta que satisfagas tu deuda?
Se lo vas a devolver en un determinado período de tiempo.
Esto es algo que muchas veces se nos olvida. Y te voy a poner un ejemplo que vas a entender rápidamente.
Entras en el Corte Inglés. Te enamoras de una tele que vale 1.000 euros. Como no tienes efectivo lo financias a 12 meses sin intereses (primer truco porque seguro que pagando al contado obtendrías algún tipo de descuento, luego ahí está el pago de intereses que realmente haces) porque así puedes ir pagándolo poco a poco. Tienes la tele instalada en casa a los dos días.Qué pasada. Cómo se ve.
Al mes siguiente te llega la primera letra: no problema. La tele está muy muy bien.
Al mes siguiente te llega la segunda: no problema. La tele sigue estando muy bien, aunque ya te has acostumbrado a ella.
Al mes siguiente te llega la tercera: no problema pero pica. La tele ya lleva un tiempo en casa.
A mitad de año, te llega la sexta letra: ya te has acostumbrado por completo a la tele. De hecho ha bajado su precio y si antes pagaste por ella 1.000 euros ahora te la podrías comprar por 700.
A los 10 meses la tele sigue ahí y tú sigues pagando letras.
Finalmente a los 12 meses has terminado de pagar. Ya no te acuerdas de por qué estabas pagando y desde luego tu tele de nueva no tiene nada.
Satisfacer un deseo impulsivo inmediatamente y financiándolo con dinero que irás consiguiendo en el futuro hace que si o si estés pagando cuando ya cualquier motivación ha desaparecido por completo.
Y eso contando con que puedas pagarlo. ¿Qué sucede si por lo que sea cambian tus condiciones y no puedes hacer frente a esos pagos futuros?. La cagaste Burt Lancaster.
Pagando adicionalmente unos intereses.
Si no tienes dinero para comprar un bien ahora y lo tienes que financiar vas a pagar un añadido. Vas a pagarle unos intereses a quien te deja ese dinero y esos intereses pueden ser muchos o pocos (desde un 10-12% de un préstamo personal hasta un 24% de algunas tarjetas de crédito)
¿Realmente necesitas tanto ese artículo como para pagar entre un 10 y un 24% más por él?
¿De verdad?
Ahora ya sabes lo que supone realmente pedir un préstamo, ya solo necesitas saber cuánto de más vas a pagar por pedir ese préstamo y por eso he titulado este artículo » Simulador para saber cuánto voy a pagar por mi préstamo «, porque pinchando en la siguiente imagen vas a poder descargarte una herramienta para calcular los intereses que pagarías por pedir una determinada cantidad de dinero, durante un tiempo determinado y a un tipo de interés determinado.
¿Y sabes lo mejor?
Que vas a poder introducir en la herramienta distintas opciones y el simulador te dirá la cuota que pagarías en cada caso y por cuál vas a pagar más intereses, y con esto ya no tendrás problema para elegir entre el concesionario o tu entidad financiera de toda la vida.
Eso sí, siempre que elijas comprar los coches como los pobres,.. quizá te interese saber cómo compran los coches los ricos.
Recuerda a más formación en Finanzas Personales más posibilidades de salir adelante y mejorar tu Economía Doméstica. Está en tu mano.
Si te ha gustado la entrada, ayúdame: dale al botón!! y comparte en tus redes sociales.
Tienes más herramientas disponibles para ti a un paso. Solo tienes que suscribirte.